miércoles, 19 de febrero de 2014

Mi primera novela

A veces una ilusión se te mete en la cabeza y empiezas a trabajar en ella, sin pensar en su alcance, su factibilidad, tus posibilidades de realizarla, etc. Estos aspectos que en tu trabajo diario tienes que medir con cuidado y eficacia no cuentan. ES UNA ILUSIÓN.
Esto es lo que me pasó a mí hace 10 años. Lo he escrito bien: 10 años. Probablemente os parezca raro el que conozca con precisión cuando lo empecé. Normalmente como la mayoría de las personas que conozco, escribo en un documento la fecha de finalización y no la de comienzo, pero algo debí intuir cuando en este caso, puse en la primera página, el día y la hora exacta en la que comencé la novela.
Desde hace años me ha gustado el escribir y a pesar de tener varios libros técnicos y algún premio por ellos, siempre me había preguntado si sería capaz de escribir una novela. No me acuerdo ya, cómo ni por qué tomé la decisión en aquel momento. Solo que encendí el portátil y me puse a ello.
Evidentemente uno escribe sobre los temas que le gustan, por lo que decidí centrarme en una novela de acción. También tengo claro el porqué del protagonista y su trabajo. En aquel entonces trabajaba en una empresa en la que las patentes eran vitales para la misma.
Pensando en todo lo que había leído hasta aquel momento, la mayoría de los protagonistas de novelas de acción relacionados con descubrimientos tecnológicos, eran espías al servicio de sus países.
Pensé en trasladar la novela al mundo empresarial, por lo que creé un detective enfocado a casos de espionaje industrial, que es en donde hoy en día se dan los casos de incidentes de patentes. No hay más que ver los juicios entre Apple y Samsung.
Al principio la ilusión es muy fuerte y conseguí escribir rápidamente unas 100 hojas, que puse a disposición de la crítica familiar. Les encantó y me animaron a seguir y terminar el libro. Debido a diferentes motivos: cambio de trabajo y sector, nuevas responsabilidades y otro conjunto de motivos, abandoné el seguir con el libro.
Un motivo que produjo una importante bajada en la ilusión de hacer el libro, fue diferentes charlas con personas que habían intentado publicar sus libros, y la dificultad para hacerlo por los métodos tradicionales. A día de hoy sigue siendo muy difícil en que los editores lean tus obras, confíen en ti y te den una oportunidad.
El año pasado y con motivo de publicar el libro de mi hijo Sergio aprovechando los nuevos sistemas de autopublicación, fui cogiendo experiencia en manejarme con ellos y además de publicar el libro de mi hijo, publiqué yo también un libro técnico sobre MS-Visio que me satisfizo bastante.
En esos momentos mi mujer comentó con mi hijo Sergio (el auténtico escritor de la familia), la historia de mi novela y como me había rendido. Sergio tiene muchas buenas cualidades, dentro de las cuales una de las más importantes es la constancia. Utilizándola durante los últimos meses, constantemente me ha empujado a terminar mi novela, mientras el a su vez preparaba su segundo libro.
Como uno no puede resistirse a los deseos de un hijo volví a retomar el libro, con la intención de acabarlo. Hace aproximadamente unas cinco semanas que al fin lo terminé y desde hace tres, ya se encuentra disponible en las librerías más grandes del mundo: Amazon (tapa blanda y Kindle) e iTunes.

Quisiera agradecer además de a mi mujer e hijos (Anabel, Sergio, Diana) a los amigos como Javier, Eduardo, Ricardo, Fran, Mikel, Jorge, Juan y varios más que seguro que me dejo, por ser los primeros en creer en mí, adquirir el libro y darme sus opiniones y puntos de mejora.


Para los demás, aqui os dejo el primer capítulo del libro para que podaís echarles una ojeada y animaros a leerlo entero.